viernes, 18 de marzo de 2011

Semana Santa


La Semana Santa es la conmemoración anual cristiana de la PasiónMuerte y Resurrección deJesús de Nazaret o, lo que es igual, conmemorar sus últimos días; por ello, es un período de intensa actividad litúrgica dentro de las diversas confesiones cristianas. Da comienzo el Domingo de Ramos y finaliza el Domingo de Resurrección, aunque su celebración suele iniciarse en varios lugares el viernes anterior (Viernes de Dolores) y se considera parte de la misma el Domingo de Resurrección.
La Semana Santa va precedida por la Cuaresma, que culmina en la Semana de Pasión donde se celebra la eucaristía en el Jueves Santo, se conmemora la Crucifixión de Jesús el Viernes Santo y la Resurrección en la Vigilia Pascual durante la noche del Sábado Santo al Domingo de Resurrección.
Durante la Semana Santa tienen lugar numerosas muestras de religiosidad popular a lo largo de todo el mundo, destacando las procesiones y las representaciones de la Pasión.

Los días más importantes de la Semana Santa son los formados por el llamado Triduo Pascual: La introducción al Triduo el Jueves Santo y los días Viernes Santo, en el que se conmemora la muerte de Cristo; Sábado Santo, en el que se conmemora a Cristo en el sepulcro, y el Domingo de Pascua de la Resurrección.[editar]

La fecha de la Semana Santa


La Semana Santa, se inicia el Domingo de Ramos, y finaliza el Domingo de Resurrección o Pascua de Resurrección. La fecha de la semana Santa, es variable, se calcula para el (Ver "Historia").

La Semana Santa es la semana en la cual el cristianismo celebra los eventos de fe relacionados a los últimos días de Jesús, incluyendo en particular, su pasiónmuerte y resurrección.
A principios del siglo IV había en la cristiandad una gran confusión sobre cuándo había de celebrarse la Pascua cristiana o día de Pascua de Resurrección, con motivo del aniversario de la resurrección de Jesús de Nazaret. Habían surgido en aquel momento numerosas tendencias o grupos de practicantes que utilizaban cálculos propios. Ya en el Concilio de Arlés (en el año 314), se obligó a toda la Cristiandad a celebrar la Pascua el mismo día, y que esta fecha habría de ser fijada por el Papa, que enviaría epístolas a todas las iglesias del orbe con las instrucciones necesarias. Sin embargo, no todas las congregaciones siguieron estos preceptos.
Es en el Concilio de Nicea I (en el año 325) donde se llega finalmente a una solución para este asunto. En él se estableció que la Pascua de Resurrección había de ser celebrada cumpliendo unas determinadas normas:
  • Que la Pascua se celebrase en domingo.
  • Que no coincidiese nunca con la Pascua judía, que se celebraba independientemente del día de la semana. (De esta manera se evitarían paralelismos o confusiones entre ambas religiones).
  • Que los cristianos no celebrasen nunca la Pascua dos veces en el mismo año. Esto tiene su explicación porque el año nuevo empezaba en el equinoccio primaveral, por lo que se prohibía la celebración de la Pascua antes del equinoccio real (antes de la entrada del Sol en Aries).
No obstante, siguió habiendo diferencias entre la Iglesia de Roma y la Iglesia de Alejandría, si bien el Concilio de Nicea dio la razón a los alejandrinos, estableciéndose la costumbre de que la fecha de la Pascua se calculaba en Alejandría, que lo comunicaba a Roma, la cual difundía el cálculo al resto de la cristiandad.
Finalmente fue Dionisio el Exiguo (en el año 525) quien desde Roma convenció de las bondades del cálculo alejandrino, unificándose al fin el cálculo de la pascua cristiana.
La Pascua de Resurrección es el domingo inmediatamente posterior a la primera Luna llena tras el equinoccio de primavera, y se debe calcular empleando la Luna llena eclesiástica; sin embargo, ésta casi siempre coincide con la Luna llena astronómica, de modo que para efectos de cálculo es generalmente válido emplear la más tradicional definición astronómica. Por ello puede ser tan temprano como el 22 de marzo, o tan tarde como el 25 de abril.
En algunos países se suspenden las labores docentes durante dos semanas que abarcan desde el sábado anterior al viernes santo hasta el segundo domingo después del Viernes Santo.


La Semana Santa alrededor del mundo




[Semana Santa en España


La escuela castellana es, por historia y patrimonio, la más relevante.[cita requerida] En Medina del Campo (Valladolid), en 1410 San Vicente Ferrer instauró las procesiones de disciplina. La Corte en Valladolid permitió que los grandes imagineros del Barroco español y de fuera de sus fronteras se establecieran en la ciudad, como Juan de JuniPompeyo LeoniFrancisco de Rincón oGregorio Fernández, los cuales tallaron grandes imágenes y escenas para las Cofradías de la ciudad. En la actualidad, además de tener la consideración de Interés Turístico Internacional, Valladolid es sede del Museo Nacional de Escultura, y su Semana Santa es conocida como "el museo en la calle".
La Escuela Castellana pervive en los desfiles de su entorno, y así, tienen la consideración de Interés Turístico Internacional la vecina localidad de Medina de Rioseco y las ciudades de Zamora,Salamanca, y León.
En el sur, las procesiones en Andalucía y en la región murciana son de grandes proporciones, y dan lugar a grandes manifestaciones de fervor popular. En Sevilla hay famosas tallas barrocas, como la Virgen Macarena o el Jesús del Gran Poder, los sevillanos por las calles ante emocionantes demostraciones de religiosidad. En Córdoba, verdadera tierra de saetas, se producen imágenes únicas con el discurrir de cofradías como la del Gitano por la cuesta del bailío el Domingo de Ramos, o las Cofradias del Viernes Santo a su paso por la judería y la Mezquita-Catedral. En Granada, los desfiles son más solemnes y silenciosos. Conocida es sobre todoSevilla por la cantidad de visitantes y fama de la fiesta local en la capital hispalense, acompañada de Málaga que también es ampliamente conocida. Ambas son fiestas declaradas de Interés Turístico Internacional.
La Semana Santa en Cartagena fue la primera de la Región de Murcia en recibir la declaración de Fiesta de Interés Turístico Internacional, en buena medida motivado por su particular modo de observar los desfiles pasionales, en los que se amalgaman los ricos bordados, la luz, la flor, el perfecto orden marcial, la música, y especialmente las bellas tallas de escultores renombrados como Francisco SalzilloJosé Capuz o Mariano Benlliure. En Murcia salen a la calle algunas de las obras maestras de Francisco Salzillo. Ya en Lorca, las hermandades compiten en la espectacularidad de los trajes de los personajes del desfile, destacando los excepcionales bordados locales. En 2007, la Semana Santa en Lorca fue declarada de Interés Turístico Internacional. En Orihuela (Comunidad Valenciana), la Semana Santa ha sido recientemente distinguida con la declaración de de Interés Turístico Internacional, reconociendo así una larga tradición artístico-religiosa de gran raigambre en la que no faltan los magníficos pasos barrocos y el esplendor de sus desfiles.

Fuera de los focos castellano, andaluz y levantino, existen otras celebraciones completamente distintas. Por citar un ejemplo, también en el norte de España hay celebraciones de gran importancia como las de Ferrol o Vivero. Tampoco no podemos olvidar los tambores del Bajo Aragón, muy especialmente en las localidades de HíjarAlcañiz y Calanda. Parece que la tradición nace en Híjar a principios del siglo XVI, cuando los franciscanos comienzan a organizar la celebración de la Semana Santa tal como hoy se conoce ya que antes se se reunían los hijaranos alrededor del Calvario de la localidad haciendo ruido con cacharros de todo tipo en protesta de la injusta muerte de Cristo y también se hacía un via crucis que aún se conserva, rematado por la ermita barroca del Santo Sepulcro. Probablemente es en el siglo XIX cuando la celebración adquiere la forma actual, con el uso masivo del tambor y el bombo por parte de la mayoría de la población. Todo comienza en la medianoche del Jueves al Viernes Santo, cuando toda la población se reúne en la plaza mayor, vestidos con túnicas negras. A una señal del alcalde todo el mundo empieza a tocar, justo en el momento en que el jueves se convierte en viernes, en un momento al que se conoce con el nombre de "Romper la hora". A partir de ese momento no dejarán de sonar hasta el Sábado Santo por la tarde. Recientemente también ha merecido la declaración de Interés Turístico Internacional la Semana Santa en Hellín (provincia de Albacete,Castilla-La Mancha).


La cuaresma

La Cuaresma es el tiempo litúrgico de conversión, que marca la Iglesia para prepararnos a la gran fiesta de la Pascua. Es tiempo para arrepentirnos de nuestros pecados y de cambiar algo de nosotros para ser mejores y poder vivir más cerca de Cristo.
La Cuaresma dura 40 días; comienza el Miércoles de Ceniza y termina antes de la Misa de la Cena del Señor del Jueves Santo. A lo largo de este tiempo, sobre todo en la liturgia del domingo, hacemos un esfuerzo por recuperar el ritmo y estilo de verdaderos creyentes que debemos vivir como hijos de Dios.
El color litúrgico de este tiempo es el morado que significa luto y penitencia. Es un tiempo de reflexión, de penitencia, de conversión espiritual; tiempo de preparación al misterio pascual.
En la Cuaresma, Cristo nos invita a cambiar de vida. La Iglesia nos invita a vivir la Cuaresma como un camino hacia Jesucristo, escuchando la Palabra de Dios, orando, compartiendo con el prójimo y haciendo obras buenas. Nos invita a vivir una serie de actitudes cristianas que nos ayudan a parecernos más a Jesucristo, ya que por acción de nuestro pecado, nos alejamos más de Dios.
Por ello, la Cuaresma es el tiempo del perdón y de la reconciliación fraterna. Cada día, durante toda la vida, hemos de arrojar de nuestros corazones el odio, el rencor, la envidia, los celos que se oponen a nuestro amor a Dios y a los hermanos. En Cuaresma, aprendemos a conocer y apreciar la Cruz de Jesús. Con esto aprendemos también a tomar nuestra cruz con alegría para alcanzar la gloria de la resurrección.
40 días
La duración de la Cuaresma está basada en el símbolo del número cuarenta en la Biblia. En ésta, se habla de los cuarenta días del diluvio, de los cuarenta años de la marcha del pueblo judío por el desierto, de los cuarenta días de Moisés y de Elías en la montaña, de los cuarenta días que pasó Jesús en el desierto antes de comenzar su vida pública, de los 400 años que duró la estancia de los judíos en Egipto.
En la Biblia, el número cuatro simboliza el universo material, seguido de ceros significa el tiempo de nuestra vida en la tierra, seguido de pruebas y dificultades.
La práctica de la Cuaresma data desde el siglo IV, cuando se da la tendencia a constituirla en tiempo de penitencia y de renovación para toda la Iglesia, con la práctica del ayuno y de la abstinencia. Conservada con bastante vigor, al menos en un principio, en las iglesias de oriente, la práctica penitencial de la Cuaresma ha sido cada vez más aligerada en occidente, pero debe observarse un espíritu penitencial y de conversión.